Entre los antiguos, la mariposa era el emblema del alma y de la atracción inconsciente hacia lo luminoso, símbolo del renacer. Una mariposa es símbolo de transformación total, y representa la necesidad de cambio y mayor libertad, y a la vez valentía. Una mariposa pasa de arrastrarse en la tierra a tocar el celeste azul del firmamento con una sensación de ligereza. En pocas palabras, podría tratarse del mismo significado de la vida humana; al fin y al cabo, todos luchamos por ser mariposas.
A su vez las mariposas simbolizan el alma,
el renacimiento, el despojo de lo terrenal hacia lo espiritual. Las
mariposas a lo largo de los tiempos han sido algo más que simplemente un
símbolo de cambio y belleza, también han sido consideradas como un ente
entre el mundo de los mortales y el mundo sobrenatural. Una mariposa es
un ser que vuela tan ligero y tan libre, que difícilmente se nota con
facilidad. También se decía que los espíritus tomaban forma de mariposas
o se apoderaban del cuerpo de una mariposa para volver y ser libres por
este mundo, cuidar de quienes amaban y advertirles sobre
acontecimientos futuros. Las mariposas son seres juguetones que aletean
por los bosques y sobre los lagos anunciando nuevos cambios, o
simplemente disfrutando de la libertad con la que el viento las hace
danzar tan libremente.
Se dice que cuando el ser humano muere su
alma pasa por un proceso de metamorfosis que se vuelve mariposa, y que
regresa a la tierra a cuidar a sus seres queridos. Es el vuelo de un
alma libre que se eleva en el aire.
No hay comentarios:
Publicar un comentario